Largos aplausos, tres bises y cuatro ovaciones de pie saludaron el homenaje a Farinelli de la mezzosoprano Cecilia Bartoli, directora artística del Festival de Salzburgo y directora de la Ópera de Montecarlo, el domingo 7 de mayo, en el Obecni Prague dum.
El concierto, patrocinado por la Embajada de Italia en Praga, fue organizado por Nachtigall Artists, en colaboración con la Ópera de Montecarlo y el Instituto Cultural Italiano de Praga, como parte de las celebraciones del centenario de su fundación.
En la aclamada actuación, la incansable y decidida Cecilia Bartoli, acompañada de los Músicos del Príncipe de Mónaco, dirigida por el maestro Gianluca Capuano, interpretó arias y obras orquestales de GF Handel -gran distribuidor del melodrama italiano en Europa-, Nicola Porpora, Johann Adolph Hasse, Georg Philipp Telemann y Antonio Vivaldi.
Farinelli, nacido Carlo Broschi, fue un intérprete legendario, una especie de estrella del rock barroco que cantó la música más virtuosa jamás escrita para la voz humana. Cecilia Bartoli es una estrella absoluta de los siglos XX y XXI: durante su carrera ha vendido más de doce millones de grabaciones de audio y video, convirtiéndose en la artista clásica viva más vendida de todos los tiempos. Ambos son intérpretes excepcionalmente dotados y con una expresividad admirable.
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