Un incendio de grandes proporciones se desarrolló desde la tarde de ayer en Viña del Mar, ciudad de unos trescientos mil habitantes ubicada a 120 km al norte de Santiago de Chile.La cifra provisional, según declaraciones de Patricio Brito, comandante del Cuerpo de Bomberos de la ciudad, habla de al menos dos muertos y entre 400 y 500 casas destruidas o muy dañadas por las llamas. La ciudad, que mira al Océano Pacífico, es uno de los destinos turísticos más importantes del país.

Durante la noche, la delegada presidencial de la región de Valparaíso, Sofía González, dijo que las llamas aún no se habían extinguido y que la situación general se desarrollaba. Más de un centenar de unidades de Bomberos y una decena de brigadas de la Guardia Forestal de Chile (Conaf) se encuentran comprometidas en el lugar.

Las potentes rachas de viento que afectaron ayer a toda la región, soplando a una velocidad de entre 40 y 50 km/h durante todo el día, facilitaron la dinámica de propagación de las llamas. Más de 110 hectáreas de bosque que rodea la ciudad se convirtieron en humo.

Presidente Boric declara estado de calamidad

Mientras tanto, ante la gravedad de la situación actual y los peligros para los ciudadanos, el presidente de Chile, Gabriel Boric, ha declarado el estado de emergencia por calamidades en toda la región. Además, la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) declaró alerta roja en la región de Viña del Mar, evacuando las localidades de Tranque Sur, Puerto Montt, Puerto Aysèn, Cabritera, Forestal Alto, Siete Hermanas.

El decreto gubernamental, en proceso de finalización, prevé el nombramiento de un jefe de la defensa nacional que tendrá la facultad de limitar o interrumpir los derechos constitucionales de los ciudadanos, como los de reunión y circulación, en nombre de la seguridad y el restablecimiento de la normalidad en la localidad