por Alberto Galvi –

Con las elecciones legislativas chilenas del domingo 21 de noviembre se renovará gran parte del Congreso. En efecto, se elegirán 155 diputados y 27 de los 50 senadores. El Congreso es bicameral y el Senado tiene actualmente 43 escaños, pero este número aumentará a 50 en las elecciones de 2021. Los senadores se eligen por un mandato de 8 años, renovándose la mitad cada 4 años. La Cámara de Diputados está compuesta por 155 miembros elegidos por 4 años.
La disputa que más llama la atención de los ciudadanos es la primera vuelta de las elecciones presidenciales. El presidente es elegido directamente por mayoría absoluta en dos vueltas si es necesario para un mandato único de 4 años, y una posible segunda vuelta podría tener lugar el 19 de diciembre.
El gobierno de Sebastián Piñera comenzó en 2018 y se caracterizó por el malestar social y la reforma constitucional. De los siete candidatos presidenciales, ninguno supera el 30 por ciento de apoyo, mientras que el 23 por ciento de los votantes aún están indecisos. El reciente aumento de popularidad de José Antonio Kast coincidió con la debacle de Sebastián Sichel, candidato de la alianza oficialista Juntos Podemos Más. Sichel sorprendentemente ganó las primarias de la coalición en julio, pero cayó en desgracia después de admitir haber retirado dinero de su cuenta de jubilación mientras se oponía a un proyecto de ley que permitía a los chilenos hacer lo mismo. Los candidatos Provoste y Boric, en cambio, quieren desmantelar parte del modelo económico liberal de Chile, incluidas las pensiones privadas, en favor de más servicios sociales.
El candidato de la alianza AD (Apruebo Dignidad) es Gabriel Boric, apoyado por el Frente Grande y el PC (Partido Comunista): propone una agenda llena de cambios, en línea con el proceso constituyente. En la derecha, el líder del Partido Republicano, José Antonio Kast, que ofrece el orden y la estabilidad perdidos tras los disturbios de 2019, no pertenece a la coalición de gobierno de Sebastián Piñera, Chile Vamos.
Otros candidatos incluyen a Yasna Provoste, quien actualmente representa la coalición de centro izquierda Unidad Constituyente. También está el candidato de la coalición de gobierno de Sebastián Sichel, Marco Enríquez Ominami, del PP (Partido Progresista), que se postula por cuarta vez a la presidencia. y Franco Parisi del CEO (Partido de la Gente). En la extrema izquierda, el candidato Eduardó Artés aseguró que él mismo encabezaría las manifestaciones contra el gobierno.
Esta es una elección de vital importancia, no sólo por la compleja situación económica que enfrenta Chile, donde se espera que la inflación alcance el 7 por ciento en 2021, sino también porque el próximo gobierno tendrá que implementar la nueva Constitución; El 78,28 por ciento de los electores votó a favor de una modificación de la Carta Fundamental. También tendrá que gestionar el tenso escenario político chileno provocado por los levantamientos sociales de octubre de 2019, con manifestaciones legítimas a favor de bienes públicos de calidad como educación, pensiones y salud.
Además, los temores sobre la migración, la seguridad pública y los cambios en los valores sociales han empujado los votos hacia la extrema derecha, en detrimento de los partidos de izquierda, haciendo de las elecciones del 21 de noviembre una batalla entre visiones encontradas sobre el futuro de Chile.